QUERIDOS "PRINGAOS" Y "PRINGÁS" DE NAVIDAD, NO ESTÁIS SOLOS. DE "PRINGAOS DE NAVIDAD" SE SALE CON LA AYUDA ADECUADA, Y ESA AYUDA, ES LO QUE VAIS A ENCONTRAR AQUÍ.
SE BUSCAN "PRINGAOS DE NAVIDAD"QUE QUIERAN DEJAR DE SERLO
El «pringao de navidad» o «la pringá de navidad», son seres humanos de apariencia normal, como tú y como yo.
No se distinguen a simple vista.
Caminan entre nosotros. Trabajan con nosotros. Viven entre nosotros.
El «pringao de navidad» puede ser cualquiera.
Tu vecino de arriba, tu compañera de trabajo o hasta tu madre.
Tú mismo, podrías ser, sin ser consciente de ello, un auténtico «pringao de navidad» sin diagnosticar todavía.
Sí, porque el «pringao de navidad» puede no haberlo sido nunca antes y de repente, un año, convertirse en uno, casi sin querer.
Muchos «pringaos de navidad» son hereditarios, pero se puede acabar siendo uno sin antecedentes en la familia.
La educación y el ambiente familiar, son factores de riesgo, así que, conviene estar alerta.
Conocer los síntomas e identificarlos con celeridad, ayuda, y mucho, a evitar el problema antes de que no tenga remedio.
¿PERO CÓMO SE DIAGNOSTICA? ¿PUEDO SER YO UN "PRINGAO DE NAVIDAD" SIN SABERLO?
A ver. El «pringao de navidad» se diagnostica actualmente mediante un breve cuestionario, que permite de manera rápida, pero 100% eficaz, identificarlo.
Tranquilo. Es una prueba totalmente indolora. Tampoco necesitas un papel ni un lápiz.
Responde mentalmente, para ti mismo, a estas preguntas y sabrás si encajas en el patrón o no:
- ¿Has buscado en Youtube o en blogs más de 5 veces en la última semana ideas para una cena de navidad?
- ¿Has guardado alguna de esas recetas que has visto para la cena de Navidad en una lista de favoritos?
- ¿Has hecho una lista de ingredientes que necesitas para hacer esas recetas y estas pensando en comprarlos?
Ojo, ojo, que si has respondido que sí a más de una de las anteriores preguntas, hay cierto riesgo, pero sigamos:
- ¿Lo de buscar recetas en Youtube y apuntar ingredientes quedó atrás y esta semana piensas pasártela de mercado en mercado buscando carnes, pescados, mariscos y viandas navideñas como para una boda?
- ¿Va a venir gente a cenar a tu casa en Nochebuena, en Nochevieja, o peor aún, en ambas ocasiones?
- ¿Además esos mismos invitados van a venir a comer el día de Navidad, el día de Año Nuevo, o peor aún, en ambas ocasiones?
Ojito, ojito, que responder que sí a alguna de las preguntas de esta segunda tanda, ya casi casi nos convierte en «pringaos de navidad», pero no es definitivo todavía. Sigamos con el test:
- ¿Has pedido el día 24 libre para empezar a cocinar desde por la mañana?
- ¿Tienes una mesa de esas extensibles en el salón y aún así piensas que tal vez necesites otra mesa y más sillas?
- ¿La silla que has reservado para ti, es esa silla pegada al pasillo, que permite levantarse durante la cena para ir a la cocina sin «molestar» a los demás?
Aquí sí. Si en esta última serie de preguntas, has respondido que sí, aunque sólo sea a una, estamos ante un caso de «pringao de Navidad» nivel Dios. Esta Navidad vas a «pringar» en la cocina, sí o sí.
VALE. SOY UN "PRINGAO DE NAVIDAD" Y ¿AHORA QUÉ?
Lo primero de todo, transmitirte calma. Ser un «pringao de navidad» no siempre es grave.
Socialmente está bastante aceptado y no es un un problema, en absoluto, si eres feliz cocinando para los demás.
A ver.
Te vas a tirar más horas en la cocina que Chicote en su programa, pero cuando a uno le gusta cocinar para que los demás disfruten de la cena ¿Que son todas esas horas cocinando?. Nada.
Vas a pelar más patatas que un recluta en cocinas cuando se hacía la mili…
… y vas a llorar pelando cebolla, más que España el día que se murió Chanquete, pero bueno. ¿Que son unas lagrimitas cuando uno es feliz cocinando?
Puede, pero sólo puede, que algo se tuerza y a lo mejor llores hasta sin cortar cebolla. Cosillas de los nervios y la presión de ese día, en la que parece que todo tiene que salir bien obligatoriamente, pero nada que no compense la felicidad de cocinar todo el día, para que los demás disfruten de la cena.
¿Y lo que se goza en la cocina, dándole los últimos toques al cocinado, cuando ya los invitados están en la mesa dando cuenta de los entrantes y tomándose ya sus vinos? Eso no esta pagado.
¿Y lo bonito que es cuando luego todos te dicen lo bueno que te ha quedado todo?, bueno, todos menos el cuñado de turno, que te sale con sus frases de cuñado:
«esta un pelín soso para mi gusto… pero no esta mal»
«esto te habría quedado buenísimo si….»
«a la que le sale bueno el cordero es a …»
En fin, ya sabes, cosas de cuñados, que a veces que no saben cómo agradecerte las 10 horas que te has tirado pringando, perdón, quise decir cocinando para ellos. Cómo se hacen querer los condenados.
En definitiva, si cocinar en estas fiestas te gusta, genial. Ningún problema.
Ahora bien…
Ahora bien…
…si lo de cocinar en la cocina, para ti es sinónimo de «pringar en la cocina» y esta navidad no te apetece nada pringar, entonces tengo buenas noticias para ti.
De «pringao de la navidad» se sale con un poquito de ayuda profesional.
Y para eso esta «el asador en tu casa». Para brindarte esa ayuda profesional.
Sigue leyendo, que esto se pone interesante.
VENGA. NECESITO ESA AYUDA Y LA NECESITO YA. ¿CÓMO VAIS A CONSEGUIR QUE NO "PRINGUE" ESTA NAVIDAD?
Muy fácil
Si has llegado hasta aquí, ya has dado el paso más importante para dejar de ser un «pringao de navidad», que no es otro que, ser consciente del problema y querer cambiarlo.
Nosotros ya hemos «pringao» y cocinado por ti en nuestras cocinas profesionales, asados tradicionales, pero con la vanguardia de la baja temperatura.
Cochinillos, Corderos, Terneras, Pulpos… y muchas más cosas ricas, asadas en su propio jugo, durante más de 10 horas, a baja temperatura.
El resultado, son asados con todo el sabor tradicional, pero multiplicado.
A ver cómo lo explico para que se entienda bien: Asados a los que, ni el más cuñado de los cuñados, les va a poder poner ni un sólo defecto.
Fíjate en lo que te estoy diciendo: ni tu cuñado va a ser capaz de mejorar el resultado, y no lo digo yo, lo dicen los que ya han probado nuestros productos.
Pero espera, aún hay más.
La cocina a baja temperatura hace que estos platos, sean mucho más digestivos que cocinados de forma tradicional.
O sea: ricos, riquísimos y además nada de «pesados».
Y lo más importante: llegan a tu casa ya cocinados y preparados, para que en apenas unos minutos, tengas la cena lista y tú puedas disfrutar de lo bueno: los momentos con los amigos y familia alrededor de la mesa.
ESO SUENA MUY BIEN, PERO TIENE QUE HABER ALGÚN "PERO"... ¿NO?
Si y no.
Me explico.
Nuestros asados a baja temperatura, y así lo afirman quienes ya nos han probado, te van a sorprender a ti y a tus invitados. Eso esta garantizado.
El pero, que sí que lo hay, es que sólo podemos ayudar a 800 «pringaos de navidad». Ni uno más.
Nuestra producción es artesanal y limitada.
Limitada en origen, porque trabajamos con materias primas autóctonas, locales y de calidad.
Y limitada también por nuestros plazos de producción. Ten en cuenta que cada pieza es asada durante 10 horas y eso nos impide producir miles de unidades.
No estamos hablando de producciones en serie, en cocinas industriales. Estamos hablando de una producción artesanal, con el mismo mimo y cariño que pondrías tú en su cocinado.
Por eso, especialmente en los productos más demandados en estas fechas, tenemos un número de unidades, que en estos momentos no nos permiten atender más de 800 cenas navideñas.
Cuando estes leyendo esto, serán ya algunas menos.
ESTOY CONVENCIDO. ¿QUE PODEMOS CENAR EN NAVIDAD SIN QUE TENGA QUE "PRINGAR" EN LA COCINA?
A ver, puedes ver en nuestra tienda online todos los platos que preparamos: Ternera, Cerdo, Pollo, Cochinillo, Cordero, Pulpo y varias guarniciones.
En estas fechas, los productos más demandados son estos:
UNA ÚLTIMA COSA: ¿NOS AYUDAS A AYUDAR A OTROS?
Este cruzada que hemos emprendido no es fácil.
Queremos que la gente «pringue» menos y disfrute más.
Tal vez nuestro servicio no es para ti, pero conoces a alguien a quien pudiera venirle bien conocer lo que hacemos. Si es así, por favor, ayúdanos enviándole el enlace a esta página.
Es muy fácil, apenas tienes que copiar la dirección o URL que hay arriba en el navegador, y pegarla en un mail, un whatsapp o un tus redes sociales, para que otros puedan llegar hasta aquí.
A ti te cuesta un minuto, y alguien te lo agradecerá mucho, y nosotros también.