El cochinillo asado es uno de los platos más emblemáticos de la cocina tradicional, especialmente en celebraciones y eventos especiales. Su piel crujiente y carne tierna lo convierten en un verdadero manjar, pero para realzar su sabor y equilibrar la riqueza de la carne, es esencial acompañarlo con las guarniciones adecuadas. Aquí te presento las 5 mejores guarniciones que elevarán tu cochinillo asado a otro nivel, aportando frescura, contrastes y texturas perfectas.
1. Patatas Panaderas
Las patatas panaderas son el acompañamiento clásico e imprescindible del cochinillo asado. Cortadas en rodajas finas y cocinadas lentamente con cebolla y aceite de oliva, absorben los jugos de la carne y se vuelven tiernas y llenas de sabor. Este plato sencillo pero delicioso complementa la jugosidad del cochinillo sin restarle protagonismo.
Cómo prepararlas: Corta las patatas en rodajas finas, colócalas en una bandeja de horno con cebolla, sal, pimienta y aceite de oliva. Hornea a 180ºC durante unos 45 minutos o hasta que estén doradas y tiernas. Puedes añadir un chorrito de vino blanco o caldo para realzar el sabor.
2. Ensalada de Escarola con Granada y Naranja
El cochinillo es una carne rica y grasosa, por lo que una guarnición fresca y ligeramente ácida es ideal para equilibrar el plato. La escarola, con su textura crujiente y su ligero toque amargo, combinada con granos de granada y rodajas de naranja, aporta un contraste perfecto. La acidez de la fruta y la frescura de la escarola ayudan a limpiar el paladar entre bocado y bocado, haciendo que el cochinillo se disfrute aún más.
Cómo prepararla: Mezcla escarola fresca con rodajas de naranja peladas, granos de granada y un aliño simple de aceite de oliva, vinagre de vino blanco y sal. Si quieres un toque extra, añade nueces tostadas para darle más textura.
3. Puré de Manzana
El puré de manzana es una guarnición dulce y suave que complementa maravillosamente el cochinillo asado. La dulzura y acidez de la manzana contrasta a la perfección con la carne grasa del cochinillo, aportando un equilibrio de sabores que hacen el plato más ligero y fácil de disfrutar. Además, la textura cremosa del puré se mezcla bien con la carne jugosa del cochinillo.
Cómo prepararlo: Pela y corta manzanas verdes (Granny Smith o Golden) y cuécelas con un poco de agua, azúcar y un chorrito de zumo de limón. Cuando estén tiernas, tritúralas hasta obtener un puré suave. Puedes añadir un toque de canela para darle más profundidad de sabor.
4. Coles de Bruselas con Panceta
Las coles de Bruselas son una excelente guarnición para carnes asadas, especialmente cuando se preparan con panceta o tocino. El sabor ligeramente amargo de las coles de Bruselas y la salinidad y crujiente de la panceta forman una combinación fantástica que complementa muy bien la riqueza del cochinillo. Además, es una guarnición con carácter que no se pierde entre los intensos sabores de la carne.
Cómo prepararlas: Blanquea las coles de Bruselas durante unos minutos y luego saltéalas en una sartén con panceta o tocino hasta que estén doradas y crujientes. Añade un toque de miel o mostaza si quieres darles un extra de sabor.
5. Setas Salteadas al Ajo y Perejil
Las setas son una opción perfecta para acompañar carnes ricas como el cochinillo. Su textura carnosa y su sabor terroso aportan una capa extra de complejidad al plato. Salteadas con ajo y perejil, las setas son una guarnición sencilla pero deliciosa, que añade profundidad sin ser abrumadora. Las setas como los champiñones, portobellos o setas de temporada funcionan muy bien.
Cómo prepararlas: En una sartén, saltea setas frescas con aceite de oliva y ajo picado. Cuando estén doradas, añade perejil fresco picado y sazona con sal y pimienta. Si lo deseas, puedes añadir un chorrito de vino blanco para darles un toque especial.