La receta que hoy os presento, hará que vuestros comensales lloren de la emoción al probar este cochinillo hecho por vosotros, y podáis salir a hombros, y lo más importante, con dificultad 0. Vamos a la faena.
Preparación del cochinillo segoviano:
Pasos para preparar el cochinillo segoviano.
1. Envolver el cochinillo en papel de aluminio
Envolvéis el cochinillo tal cual, sin sal, ni ningún otro tipo de aditivo (ni sal ni nada de nada) en papel de aluminio como si de una momia egipcia se tratara, es muy importante que seáis generosos para que los jugos que suelte en la cocción no se salgan.
Si alguien considera que hay que ponerle algo más para potenciar el sabor, se le puede incorporar un par de dientes de ajo y una ramita de romero, pero no es necesario.
2. Introducir al Horno
Lo metéis en el horno, a 75º, a ser posible con la opción aire, y lo dejáis 14 horas.
Y ya está, os podéis despreocupar de él. Teniendo en cuenta el tiempo, podéis meterlo el día anterior a medianoche y que vaya haciéndose a su amor.
Es importante comentar que si por cualquier circunstancia tenéis que tenerlo algo más de tiempo (se alargan las cervezas), no pasa absolutamente nada, tranquilos que no se pasará.
3. Sacar el papel de aluminio
Transcurrido ese tiempo, ( serían las dos del día siguiente), lo sacáis y con cuidado quitáis el papel de aluminio y recogéis los jugos en un cazo, colocando el cochinillo con la piel hacia arriba en una bandeja de horno.
Veremos que el cochinillo tiene una pinta horrible, pero ya veréis como cambia la cosa.
4. Introducir al horno sin papel de aluminio
Ponéis el horno a 220ª, y mientras echáis en el cazo con los jugos una cuchara rasa de sal, y según los gustos, podéis echar un poquito de agua, vino blanco, cava o brandy, a gusto del consumidor, y lo ponéis a calentar y mezcláis bien. Yo personalmente solo pongo el agua y la sal.
5. Dejar 15 minutos en el horno
Cuando el horno está a la temperatura indicada, metemos el cochinillo y lo programamos 15 minutos.
6. Condimentar con jugo del cazo
Transcurridos 5 minutos, abrimos el horno y le echamos por encima al cochinillo el contenido del cazo, y lo dejamos en el horno 10 minutos más. Ojo aquí que como os despistéis se chamuscará el invento.
7. Sacar del Horno
Transcurrido el tiempo, se saca del horno y ya está, veréis una corteza dorada y crujiente, y un carne que se deshará en la boca, digno del mejor maestro segoviano.
Si disponéis de envasadora al vacío, podéis sustituir el papel de aluminio y envasarlo, pero si no, hacerlo como os he indicado.
Esta receta vale también para cabrito y cordero.
OTRA OPCIÓN, si no queréis complicaros o tener 14 horas el horno encendido, es comprar el Cochinillo de Segovia hecho a baja temperatura de nuestra tienda.
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